lunes, 4 de abril de 2011

Capítulo 3.


¿Mi padre? Ah, mi padre.. Él estaba trabajando, y no le había avisado nadie. Tampoco le hubiera afectado mucho, pues Sara no era hija suya y para él era un incordio, que no paraba y siempre estaba agobiándolo mientras trabajaba en casa, en cambio para mi era un cielo, era mi vida como ya he dicho muchas veces .. Era la razón por la que yo no me iba de casa, el mes pasado cumplí los 18 y desde antes que naciera Sara, deseaba cumplir los dieciocho para irme de casa.
Siempre he sido independiente, es algo que a mi madre le gustaba.
Ahora todo sería diferente, nada sería igual .. Lo primero que haría en llegar a casa sería hablar con mis padres y acto seguido preparar las maletas. ¿Donde iría? Había pensado en quedarme unos días en casa de Laura, entonces la llamé, y me dijo que encantada. Que así podría consolarme y hacerme pasar los mejores días de mi vida.
Yo sabía que no iba a ser así, mis mejores días solo serían con Sara. Pero como ya no estaba, no me quedaba otra opción, supongo que me lo iba a pasar bien con ella.
Cuando llegamos a casa, estaba mi padre esperándonos.
Nos preguntó que por qué habíamos tardado tanto en volver, que llevaba dos horas esperando.. Nos soltó un rollo impresionante, yo tenía ganas de dormir así que me fui a mi cuarto a por la maleta. Escuché como mi padre seguía hablando y mi madre no decía una palabra. Después hubieron unos segundos de silencio total, solo se me escuchaba a mi abriendo cajones. Esos momentos los odiaba, así que me senté en la cama y esperé a que dijeran algo. Oí perfectamente como mi madre decía "Sara ha tenido un accidente por culpa de tu hija, y ha muerto"
En ese momento noté como el corazón me daba un vuelco y empezaban a salirme lágrimas. Abrí la puerta bruscamente y dije "¡Debí haberla acompañado a cruzar la calle, pero estoy segura de que ninguno de los los lo hubiera hecho si la calle que tenía que cruzar Sara era de apenas 3 metros. El tipo que la atropelló iba a más de 130km/h. y en un segundo la aplastó, era mi vida, era mi todo! No me echéis las culpas, me sobra con el remordimiento que llevo dentro, ahora mismo voy a recoger mis cosas y me voy de aquí. No voy a poder aguantar más tiempo en esta casa sabiendo que Sara...-Se me quebró la voz, empecé a llorar y dije en voz baja- que Sara no va a volver."
Antes de cerrar la puerta de un portazo vi como mi madre, llorando, agachaba la cabeza y mi padre se quedaba con la boca totalmente abierta mientras le caía una lagrima.
"No pensé que iba a ser tan fácil, no han dicho una palabra."
Terminé de hacer la maleta, y oí un portazo de la puerta principal.
Me asomé y estaba mi madre.
Mamá: Tu padre se ha ido, me ha dejado. ¡Me he quedado sola, ahora mi vida no tiene sentido! Sara se ha ido, tu te vas de casa...
Quédate unos meses, solo para hacerme compañía, para hacerme a la idea. Todo ha sido tan rápido, en tan solo en un día he perdido a todas las personas que quiero. -Vio como yo avanzaba hacia la puerta principal con las maletas y añadió:-
¿Te vas? ¿Me dejas sola? ¿Vas a permitir que tu madre muera sola? Hija, por favor. Sé que esto es muy difícil, pero no te vayas por favor.
Esto último lo dijo en voz baja, pues yo ya había salido de mi casa. No pensaba quedarme con ella, la quiero. Pero no puedo quedarme en la casa que había jugado con mi hermana, no.

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